La tripulación del remolcador de flota ATF-65 Janequeo efectuó el martes 22 de febrero una ceremonia en la bahía de Valparaíso para conmemorar el primer año de servicio en la Armada de Chile.
El buque, construido en el astillero indio Larsen & Toubro Shipbuilding, arribó al país el 22 de febrero del 2021 y su incorporación ha permitido incrementar las capacidades de rescate y salvataje de la institución, asistencia en alta mar a otras unidades y apoyo logístico a fuerzas de tareas y zonas aisladas, entre otras tareas.
En su primer año efectuó tareas logísticas, participó en el ejercicio Teamwork South (TWS) y realizó por primera vez el sostenimiento y reaprovisionamiento logístico de bases nacionales antárticas. Para este año está previsto que realice el proceso de certificación como plataforma de oportunidad para el rescate de submarinos en el Pacífico Sur.
Su comandante, capitán de fragata Rodrigo Pérez, destacó el gran trabajo de su dotación señalando que “contamos con un buque de primera línea, con un alto nivel tecnológico, el cual debemos seguir conociendo. No me cabe duda que las capacidades personales, profesionales e intelectuales de todos y cada uno de ustedes permitirán seguir cumpliendo con creces las tareas asignadas por la Armada a nuestra unidad”.
El oficial manifestó también que "gracias al exigente entrenamiento con el Centro de Entrenamiento de la Armada, la incorporación a la Escuadra, y al apoyo que recibimos para sacar nuestro buque adelante logramos el más alto estándar de entrenamiento para operar sin contratiempos desde el 20 de agosto de 2021”.
El Ministerio de Defensa Nacional de Chile aprobó el 26 de enero de 2018 el proyecto Remolcador el cual contemplaba la compra de una nueva unidad con el propósito de mantener y complementar las capacidades de rescate y salvataje que realizan el ATF-66 Galvarino y el ATF-67 Lautaro, éste último dado de baja en enero del 2022.
El 5 de marzo de 2018 fue firmado el decreto que autorizaba la adquisición por los entonces ministros de Defensa y Hacienda, y en el marco de este proyecto, las armadas de Chile y Estados Unidos suscribieron el 27 de agosto de 2018 un convenio de cooperación para buscar la mejor alternativa que existiera en el mercado y que permitiera además de salvaguardar la vida humana en el mar, servir como una plataforma de rescate y salvataje de submarinos.
Tras evaluar diversas opciones, la institución eligió un buque especializado en remolque y manejo y posicionamiento de anclas (Ahtsv) del astillero indio Larsen & Toubro Shipbuilding. La compra, por un valor de 11,5 millones de dólares, se realizó a través de la modalidad de Ventas Militares Extranjeras (FMS) del Departamento de Defensa de Estados Unidos y fue gestionado por el Naval Sea Systems Command (Navsea).
La unidad recibió trabajos en las instalaciones del astillero indio en Kattupalli que incluyeron mejoras en habitabilidad e instalaciones sanitarias además de nueva pintura en la superestructura, cubierta y casco. El buque realizó recaladas en su viaje a Chile en los puertos de Colombo, Singapur, Male y Welliington.
El remolcador, que prestó servicios inicialmente en la Escuadra Nacional, se incorporó oficialmente el 12 de enero al Comando Anfibio y Transportes Navales (Comanfitran) con puerto base en la ciudad de Talcahuano.
El ATF-65 Janequeo tiene 70 metros de eslora, 19 metros de manga y un calado máximo de 6,2 metros. Desplaza 2.500 toneladas y posee una capacidad de tracción estática o Bollard Pull de 150 toneladas. Puede transportar 38 tripulantes y 22 pasajeros.
La unidad está equipada con propulsión diésel-híbrida avanzada, posee un sistema de posicionamiento dinámico DP2 y puede combatir incendios, atender emergencias, realizar acciones de rescate, reabastecer suministros en alta mar, recuperar petróleo vertido en el mar y otras tareas.
Cuenta con dos motores principales MAN de 2290 kW, dos motores híbridos de 1600 kW de Siemens y alcanza una velocidad máxima de 13,5 nudos. Dispone de cuatro generadores de 1690 ekW de MTU además de dos propulsores de proa de 850 kW, dos propulsores de popa de 500 kW y hélices de paso controlable (CPP) de Wärtsillä.
La maquinaria de cubierta cuenta con un cabrestante de remolque tipo cascada de Rolls-Royce con una tracción nomimal de 350 toneladas, dos juegos de pasadores de remolque SWL Karmoy de 225 toneladas, dos sets de mordazas SWL Karmoy Shark Jaws de 450 toneladas, un rodillo de popa para maejo de anclas de 2,5 x 7 metros Rolls-Royce, dos cabrestantes de 15 toneladas SWL Rolls-Royce y una grúa de cubierta de 5 toneladas Sormec.