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Los bomberos del estado de California en EE.UU. afirman estar avanzando en el control del enorme incendio forestal cerca del Parque Nacional de Yosemite. El incendio de Oak, en el condado de Mariposa, ha obligado a miles de personas a desalojar sus casas y ha destruido al menos 41 viviendas. Las recientes condiciones meteorológicas favorables están ayudando a los equipos a controlar el incendio.
Según los bomberos, la sequía prolongada en el estado ha creado condiciones "extremadamente peligrosas" ya que la tierra seca contiene "una gran cantidad de combustible muerto".
El incendio Oak Fire se declaró el viernes en el condado de Mariposa, cerca del Parque Nacional Yosemite y se propagó rápidamente.
Pueblos como Weed, Lake Shastina y Edgewood fueron puestos bajo órdenes de evacuación obligatoria y se estableció un refugio para animales grandes y ganado.
En apenas dos días el fuego consumió 5.780 hectáreas, un área equivalente a más de la mitad de París. Las autoridades informaron que las llamas no podían ser contenidas.
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